Revisión del Piano de Cola Yamaha C3

Pros del piano Yamaha C3:

-Tono Hermoso.
-Escala Dúplex.
-Teclas de Ivorite.
-Excelente construcción.
-Excelente estabilidad de tono.
-Variedad de acabados.
-Excelente Garantía.
-Valor adecuado.
Contras del Piano de cola Yamaha C3
-Los pianistas que prueban un C3 quieren siempre llegar a sus hermanos mayores, como Piano
Yamaha C5 o el piano de cola Yamaha C7, por no hablar del piano de los pianos el gran cola
Yamaha CFX.
Introducción:
Hacia el año 1902, Torakusu Yamaha, fundador de Yamaha Corporation, construyó el
primer piano de cola Yamaha. Dos años después, el piano de cola Yamaha ganó el
Gran Premio de Honor en la Feria Mundial de St. Louis. Hoy en día, el piano de cola
Yamaha de la serie C es probablemente el piano más grabado del mundo.
El piano de cola Yamaha C3 es un piano de cola de 182cm de largo de 186 cm y se
encuentra comúnmente en estudios de grabación y conservatorios de todo el mundo.
Sus 186cm de largo, la escala dúplex y el sistema colector de tonos del C3, así como
el teclado de Ivorite, hacen del piano de cola Yamaha C3 una excelente opción por su
magnífica construcción.
Hacer sonar un piano Yamaha C3 es simplemente sentir sus tonos claros y nítidos y
un rango de bajos descendente muy bueno. Con 186cm el Yamaha C3 hace que
tengamos una sensación de » bajo real » y que tenga también una excelente dinámica,
lo que permite una transición suave y cómoda.
El Yamaha C3 está diseñado con una escala dúplex, la parte que no “suena” de las
cuerdas del piano (ubicada entre el puente y el arpa). El propósito de la escala dúplex
es agregar plenitud y color al sonido.
También cabe destacar el llamado coleccionista de tonos, en el Yamaha C3 es
simplemente la conexión entre a las vigas traseras y el arpa del piano, lo que permite
al Yamaha C3 que la energía del sonido se transmita a través de la caja del piano para
un tono más duradero.
El Toque del piano de cola Yamaha C3 es excelente debido a la instalación de Ivorite
que llevan sus teclas, un sustituto sintético «marfil».
Nos gusta el tacto del Ivorite por un par de razones:
La porosidad del Ivorite, que le da un mejor agarre al igual que el marfil. Y en segundo
lugar, una vez más, al igual que el marfil, el Ivorite tiene un acabado opaco y no
reflejara la luz, algo realmente molesto, especialmente durante un recital o una
presentación.
La ejecución es muy estable, la sensación es que el teclado es muy sólido y está bien
compensado. Si estás acostumbrado a tocar en un piano bien mantenido, el C3 no
debería ser un problema para que nadie se acostumbre.
Con lo que respecta a la construcción de los pianos de cola de Yamaha, nos
impresionaron los métodos de construcción de Yamaha, que incluyen su proceso de
moldeo al vacío para eliminar las imperfecciones en el arpa, el bloqueo del bloque de
pines para proteger contra las fluctuaciones de la humedad, los tornillos de
estabilización del arpa. Todo esto le da al C3 una estabilidad de afinación y tono
superior.
Por último, el Yamaha C3 viene en la opción de Ébano pulido, Ébano satinado, Blanco
pulido, Nogal americano satinado, Caoba pulida y Nogal americano pulido para
combinar con su decoración.
Conclusión, en general, estuvimos muy contentos con el Yamaha C3. Nos encanta
cómo suenan los pianos de la serie C de Yamaha en concreto esta unidad de piano de
cola Yamaha C3 que hemos analizado, se siente y se ve. La artesanía es excelente y
nos impresionaron las técnicas de construcción de Yamaha.

El legado de la serie CF de concierto continúa

Preservar la tradición no es sinónimo de rechazar el cambio. Al contrario, la tradición viene de la búsqueda constante de la perfección. Y cuando se trata de la tradición aplicada a la fabricación de los pianos de cola, existe un sonido, un timbre, al que sólo pueden aspirar los que se superan a sí mismos constantemente. Durante casi medio siglo, los pianos de cola de la mundialmente reconocida serie C de Yamaha han seguido un proceso gradual de refinamiento. El piano de cola de concierto CFX se creó sobre la base del conocimiento, las técnicas y la experiencia adquiridos a lo largo de todos esos años, con expertos artesanos vertiendo todos sus conocimientos en la creación de un piano con el que se buscaba la perfección de sonido con un nuevo y arriesgado diseño. La serie CX da un paso más en esta dirección, ofreciendo un sonido caracterizado por su brillo y su carácter, enmarcado en conjunto de formas elegantes y fluidas.

El resultado final se traduce en una serie de instrumentos con un tono refinado y un diseño arriesgado, producto de largos años dedicados a la innovación, que ha permitido a Yamaha mantenerse fiel a su herencia musical. Los pianos de la serie CX representan un nivel de progreso proporcional al número de años que conmemora el 125 Aniversario de Yamaha, progreso que transformará cualquier habitación en una sala de conciertos.